Hola Soy Myrna y soy neurótica, para mí es un honor compartir parte de mi enfermedad:

La falta de acción en mi salud, la falta de amor hacia mí misma, ha determinado en mi vida sentirme mal no solo emocionalmente si no físicamente
Actualmente siento un miedo y una frustración que invade mi vída desde que empecé a tener episodios de amenorreas constantes y dolores abdominales; haciendo un poco de historia les comento que en la primer etapa de mi juventud hubo un tiempo en el que sentí muchísimas ganas de embarazarme, no importaba la persona ni la circunstancias solo importaba embarazarme, en esos momentos no tenia ni novio, porque a parte para mi los hombres siempre han representado ser una basura, pero como obviamente no podría embarazarme sola pues la verdad no me importaba tener que buscar a alguien que quisiera hacerme un hijito sin compromiso.
Enfermamente empecé a comprar ropas de bebé a sentir que estaba embarazada y esta situación me causaba ansiedad, pues pasados tres meses cuando menos esperaba ahí estaba la respuesta, resultaba negativo todo, no había bebé, sin embargo el hecho de tener relaciones coitales y no cuidarme y a eso le sumamos no embarazarme me ponían en que pensar, así es que decidí ir al medico.
En repetidas ocasiones si se llegó a controlar ese problema, pero a la vuelta de un tiempo ahí estaban otra vez las amenorreas y ahora los atrasos eran hasta por 7 u 8 meses y bueno la desesperación a flor de piel. Después de varias visitas al médico, me dijo que no podría embarazarme porque al tener periodos anovulatorios la fecundación no se daría jamás, me sentí muy triste, entré en crisis depresivas bastante fuertes y hasta ese momento puedo decir que estaba dispuesta a hacerme los análisis para saber que sucedía con migo. Recuerdo que me realicé un ultrasonido en el cuál aparentemente reflejaba una matriz sana, con medidas aparentemente normales y superficialmente todo bien.
Posteriormente me dijeron que debía practicarme un papanicolao, con todo el miedo del mundo y las emociones encontradas fui a realizármelo y rogándole a DIOS que no me atendieran.
Sucedió que no me lo quisieron hacer por que según la tonta enfermera no tenía 26 años y por lo tanto no tenia caso realizármelo y para mi conveniencia solo me hizo un exudado vaginal.
Mi miedo fue tanto que decidí jamás ir por esos resultados me invadió el miedo de pensar que posiblemente tengo un cáncer en la matriz o una fuerte infección o hasta un sida tal vez. Mi mente enferma me dice que no debo ir porque si me dicen que tengo algo en mis entrañas me moriré pronto y prefiero decir que disfrutaré la vida mientras pueda. La triste realidad es que yo se que si tengo algún cáncer o tumor maligno en mi matriz este me avisará ya cuando no quede nada que hacer.
Por otro lado es la pena y el miedo de afrontar la realidad. No quiero sentirme inútil como mujer, pues como bien sabemos; la sociedad ha establecido que la mujer debe ser fértil para que se le considere digna de formar una familia. Tengo miedo de morirme porque se que aun me falta mucho por vivir, a demás en mi actual vida de casada he pensado que un hijo me estorbaría y que es lo mejor no tener, me resigné a decir que no tengo nada que solo son suposiciones.Hoy empiezo una nueva etapa de mi vida en N.A y puedo decir que en estas pocas 24 horas compartidas empiezo a sentirme en casa y se que no me equivoqué.